El mundo vive tiempos de cambios. El hombre vive tiempos de cambios. El Seguro vive tiempos de cambios. Si bien Heráclito ya hablaba del cambio permanente, nadie pudo imaginar jamás la velocidad de los cambios que hoy vivimos y, a la par, la velocidad en la evolución de la ciencia y la comprensión del hombre y del universo.
La Pandemia, hace apenas 4 años, disparó y aceleró cambios necesarios, disponibles y procrastinados. La Guerra nos obliga a repensar ese mundo, «sin guerras, hambre o enfermedades», que anunciaba Yuval Harari. La Inteligencia Artificial nos invita a repensar el rol central del hombre, no desde una mirada antropocéntrica sino humano-céntrica.
Y en el medio de este terremoto está el seguro.
Se impone repensar el objetivo de los congresos y los encuentros. ¿Nos reunimos para conocer o nos convocamos para entender? Tal vez interrogarnos sobre el «por qué» y el «para qué* ayude a responder esta pregunta.
¿Por qué nos reunimos? Porque así lo venimos haciendo, porque es tradición. Porque en los congresos intercambiamos miradas, ideas y conocimientos entre los miembros de la industria. La pregunta «Para qué» apunta al futuro de los encuentros del sector, no tanto al pasado. ¿Qué buscamos? ¿Qué nos falta? ¿Qué caminos no hemos transitado aún.
Tal vez todo lo anterior sea correcto. «Por qué» y «para qué». Aprender y entender.
En esta Cumbre vamos a adentrarnos en los dos extremos que hoy modifican el horizonte: la comprensión del hombre – sus impulsos, decisiones, necesidades y deseos – y las implicancias, oportunidades y riesgos que plantean la Inteligencia Artificial y la tecnología.
Vamos a intentar comprender los posibles Futuros del Seguro a partir de sumergirnos en aprender y entender. Vamos a cuestionarnos sobre verdades que creíamos reveladas e imaginar un mundo nuevo de oportunidades. Vamos a intentar seguir escribiendo el Futuro del Seguro, utilizando todas las herramientas a nuestra disposición para seguir siendo la industria que habilita el futuro por ser garantía de resiliencia.
Hoy -parafraseando a Shakespeare- la pregunta es sencilla y depende de nosotros, de nuestra actitud de nuestra vocación de cambio y adaptación, de nuestra voluntad de seguir siendo motor y garantía de la promesa de continuidad: SER O NO SER.
Gabriel Mysler
Director de Contenidos de las cumbres de la Fundación
Iberoamericana Alianza del Seguro