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https://www.eleconomista.net – El sector asegurador de la economía solo creció 0.1 % con un total de $306.5 millones en ingresos de primas a junio pasado. Al mismo mes del año pasado, la cifra era de $306.2 millones de acuerdo con la Asociación Salvadoreña de Empresas de Seguros (ASES), lo que implica un «módico crecimiento» de 0.1 %, de acuerdo con el presidente de la gremial, Pedro Geoffroy. En los últimos años el rubro ha tenido un crecimiento menor al de la economía, lo que ha provocado que reduzca su participación. Así, en 2015 este representaba 2.63 % del Producto Interno Bruto (PIB), en 2016 cayó a 2.6 % y en 2017 a 2.53 %.

El crecimiento del sector entre 2016 y 2017 fue de 1%, la tasa anterior, de 2015 a 2016 fue de 2 %. Estas son una reducción del crecimiento máximo que se alcanzó en 2015, de 6 %. El presidente de ASES aseguró que esperan un impulso en lo que queda del año por las primas que se renuevan, y que están conscientes que se ha reducido el dinamismo del sector. Aunque señala que hay otros factores de robustez, como que las empresas que proveen estos servicios tienen grandes reservas de capital.

En la región Centroamericana, además, El Salvador es el que tiene más empresas aseguradoras en el mercado, actualmente 22 % de los salvadoreños cuentan con un seguro. Este porcentaje parece alto sobre todo cuando el país no ha desarrollado aún una «cultura de seguro», es decir, la conciencia de la importancia del servicio. Geoffroy aseguró que el porcentaje se debe a los seguros de vida que dan empresas, al seguro previsional del que cuentan todos aquellos afiliados a las AFP y los seguros que contraen algunos que hacen préstamos en la banca.

Agregó que hay una «posibilidad de crecimiento ociosa», porque hay un excedente de patrimonio y de reservas en las aseguradoras que permitirá ampliar la base de clientes. Esto se debe a que el patrimonio se nutre de las ganancias de estas empresas.

Entre las apuestas para crecer está la comercialización masiva de seguros a través de otras empresas como almacenes o farmacias, y expandirse más dentro de los departamentos.

Además, reducir la siniestralidad, es decir, la cantidad de accidentes o de eventos contemplados dentro de los planes de seguro, como accidentes de autos, podrían hacer crecer más al sector. Entre los rubros de seguros donde se dan más «siniestros» están los de accidentes y enfermedades, los los vehículos, previsionales y los de vida.

De hecho actualmente están trabajando en dos proyectos de ley, una de la industria aseguradora en general, y otra de los contratos de seguros. Estas leyes vendrían a modernizar la regulación del sector que depende de una ley de los noventa y del Código de Comercio.

ASES había previsto un aumento en el costo de los seguros porque el reaseguro, que es un seguro para las aseguradoras usado en casos como el terremoto de 2001, supera sus capacidades. Sin embargo, señala que, aunque depende de cada empresa, el incremento no fue significativo.

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