https://www.publimetro.com.mx/ – MADRID, 2 (EUROPA PRESS)

Así lo ha desvelado un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (CEPAL), presentado este jueves por su secretaria ejecutiva, Alicia Bárcena.

El organismo con sede en Santiago de Chile ha explicado que, por tamaño, las micro y pequeñas empresas serán las más afectadas por este duro golpe. En concreto, las previsiones para las microempresas apuntan al cierre de 2,6 millones establecimientos y la pérdida de 6,8 millones de empleos.

Por su parte, cerrarán en torno a 98.000 empresas pequeñas, con la pérdida de 1,5 millones de puestos de trabajo, mientras que los pronósticos apuntan al cierre de 5.943 empresas medianas, con la pérdida de 390.155 empleos; y el cierre de 406 empresas grandes que conllevaría la pérdida de 231.724 trabajos.

Por sectores, los más afectados han sido aquellos que requieren un contacto físico más intensivo, como es el caso del turismo, hoteles y restaurantes, industria cultural, comercio, reparación de bienes o la moda. En concreto, en el caso de estos sectores el impacto del empleo podría conllevar a una pérdida de hasta el 34,2%.

En concreto, la CEPAL indica que el comercio perderá 1,4 millones de empresas y 4 millones de empleos, mientras que el turismo, uno de los sectores más golpeados por la crisis, por lo menos cerrará 290.000 empresas y perderá un millón de trabajos.

Otros sectores que han sufrido un impacto significativo son la minería, los servicios empresariales, la industria química, la electrónica o la electricidad, gas y agua, en los que se podría observar una pérdida del empleo del 47,6%.

El informe explica que la crisis también ha golpeado de manera severa a aquellos sectores industriales con mayor dinamismo tecnológico y ha avisado que la pandemia profundizará sus problemas estructurales.

En esta línea, Bárcena ha advertido que esto produce una «elevada probabilidad» de un cambio estructural regresivo con reprimarización, lo que supone la pérdida del valor agregado.

Respecto al despliegue de medidas de crédito por parte de las autoridades de la región, la secretaria ejecutiva ha destacado el 11,5% del PIB desplegado por Chile, el 8% de Colombia o el 7,6% de Perú.

Sin embargo, Bárcena ha afirmado que las medidas anunciadas son insuficientes, ya que suponen que las empresas generarán ‘utilidades’ o beneficios con las que devolverían los créditos y pagarían los impuestos diferidos y otras deudas, lo que implica que las perspectivas económicas se tornarán lentas, con un plazo de al menos dos años para la recuperación.

Desde la CEPAL proponen cuatro propuestas concretas para aliviar el impacto de la crisis económica en la región, que son las extensión de los plazos de medidas de apoyo a liquidez y el acceso al crédito, el cofinanciamiento a las nóminas salariales, las transferencias en efectivo a trabajadores autónomos y el apoyo financiero a las empresas de todo tamaño.

En concreto, el organismo apuesta por el aplazamiento o la cancelación de los pagos de impuestos, imposiciones previsiones y contribuciones territoriales o adelanto de las devoluciones de impuestos por lo menos hasta finales de 2020, así como la suspensión del pago de los servicios básicos sin penalizaciones hasta finales de este año.

Por la parte del crédito, el informe recomienda periodos de gracia de al menos un año, plazos de financiamiento de cinco o más años y el refuerzo de las operaciones de crédito mediante los bancos de desarrollo.

Respecto al cofinanciamiento de nóminas, la CEPAL aconseja ayudar en diferentes niveles según el tamaño de la empresa. Así, las ayudas de cofinanciamiento serían del 30% a las grandes, del 50% a las medianas, del 60% a las pequeñas y del 80% a las micro. Esto supondría la movilización del 2,7% del PIB promedio.

En cuanto a las contribuciones en dinero en efectivo, la entidad apuesta por conceder cantidades de entre 300 y 500 dólares (267 y 45 euros) para los 15 millones de trabajadores autónomos del continente, lo que supone el 0,8% del PIB.

A estas medidas se unen otras propuestas de la institución, como son el ingreso básico de emergencia, el bono contra el hambre y los apoyos a las empresas y el empleo, como parte de un conjunto articulado de ayudas.

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The Covid-19 pandemic will leave a serious toll on the Latin American economy, with more than 2.7 million businesses closed and the loss of 8.5 million jobs in the next six months, which will mainly affect micro and small businesses.

This has been revealed in a report of the United Nations Economic Commission for Latin America and the Caribbean (ECLAC), presented this Thursday by its executive secretary, Alicia Bárcenas.

The agency based in Santiago de Chile has explained that, by size, micro and small businesses will be the most affected by this hard blow. In particular, the forecasts for micro-enterprises point to the closure of 2.6 million establishments and the loss of 6.8 million jobs.

For their part, they will close down some 98,000 small enterprises, with the loss of 1.5 million jobs, while forecasts point to the closure of 5,943 medium-sized enterprises, with the loss of 390,155 jobs; and the closure of 406 large companies that would result in the loss of 231,724 jobs.

By sectors, the most affected have been those that require more intensive physical contact, such as tourism, hotels and restaurants, cultural industry, commerce, repair of goods or fashion. In the case of these sectors the impact of employment could lead to a loss of up to 34.2%.

Specifically, ECLAC indicates that trade will lose 1.4 million businesses and 4 million jobs, while tourism, one of the sectors hardest hit by the crisis, will close at least 290,000 businesses and lose one million jobs.

Other sectors that have had a significant impact are mining, business services, the chemical industry, electronics or electricity, gas and water, where a 47.6 per cent job loss could be observed.

The report explains that the crisis has also hit hard those industrial sectors with the greatest technological dynamism and has warned that the pandemic will deepen their structural problems.

Along these lines, Bárcena has warned that this produces a «high probability» of a regressive structural change with repression, which implies the loss of added value.

Regarding the deployment of credit measures by the authorities of the region, the executive secretary highlighted 11.5% of the GDP deployed by Chile, 8% by Colombia or 7.6% by Peru.

However, Bárcena has stated that the announced measures are insufficient, since they assume that the companies will generate profits or profits with which they would return the credits and pay the deferred taxes and other debts, This means that the economic outlook will slow down, with at least two years for recovery.

From ECLAC, they propose four concrete proposals to alleviate the impact of the economic crisis in the region, which are the extension of the terms of liquidity support measures and access to credit, the co-financing of payroll, cash transfers to self-employed persons and financial support for enterprises of all sizes.

In particular, the agency is committed to the deferral or cancellation of tax payments, forecast taxes and territorial contributions or the advance of tax refunds at least until the end of 2020, and suspension of payment of basic services without penalty until the end of this year.

On the credit side, the report recommends grace periods of at least one year, financing periods of five or more years and the strengthening of credit operations through development banks.

About the co-financing of payroll, ECLAC advises helping at different levels according to the size of the company. Thus, co-financing aid would be 30% for large, 50% for medium-sized, 60% for small and 80% for micro. This would involve the mobilization of 2.7 per cent of the average GDP.

In terms of cash contributions, the entity is committed to granting amounts of between 300 and 500 dollars (267 and 45 euros) for the 15 million self-employed in the continent, which represents 0.8% of GDP.

To these measures are added other proposals of the institution, such as the basic emergency income, the hunger voucher and support for businesses and employment, as part of an articulated set of aids.

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https://www.publimetro.com.mx/  –  MADRID, 2 (EUROPA PRESS)

Isso foi mostrado por um relatório da Comissão Econômica das Nações Unidas para a América Latina e o Caribe (CEPAL), apresentado nesta quinta-feira por sua secretária executiva, Alicia Bárcena.

A organização sediada em Santiago do Chile explicou que, por tamanho, micro e pequenas empresas serão as mais afetadas por esse duro golpe. Especificamente, as previsões para microempresas apontam para o fechamento de 2,6 milhões de estabelecimentos e a perda de 6,8 milhões de empregos.

Por outro lado, cerca de 98.000 pequenas empresas serão fechadas, com a perda de 1,5 milhão de empregos, enquanto as previsões apontam para o fechamento de 5.943 empresas de médio porte, com a perda de 390.155 empregos; e o fechamento de 406 grandes empresas que levariam à perda de 231.724 empregos.

Por setores, os mais afetados foram aqueles que requerem contato físico mais intenso, como turismo, hotéis e restaurantes, indústria cultural, comércio, reparo de mercadorias ou moda. Especificamente, no caso desses setores, o impacto do emprego pode levar a uma perda de até 34,2%.

Especificamente, a CEPAL indica que o comércio perderá 1,4 milhão de empresas e 4 milhões de empregos, enquanto o turismo, um dos setores mais atingidos pela crise, fechará pelo menos 290 mil empresas e perderá um milhão de empregos.

Outros setores que sofreram um impacto significativo é o de mineração, serviços comerciais, indústria química, eletroeletrônicos ou eletricidade, gás e água, nos quais foi observada uma perda de emprego de 47,6%.

O relatório explica que a crise também atingiu severamente os setores industriais com o maior dinamismo tecnológico e alertou que a pandemia aprofundará seus problemas estruturais.

Nesse sentido, Bárcena alertou que isso produz uma “alta probabilidade” de mudança estrutural regressiva com reprimarização, o que implica a perda de valor agregado.

Em relação à implantação de medidas de crédito pelas autoridades da região, o secretário executivo destacou 11,5% do PIB implantado no Chile, 8% na Colômbia ou 7,6% no Peru.

No entanto, Bárcena afirmou que as medidas anunciadas são insuficientes, pois assumem que as empresas gerarão “lucros” ou benefícios com os quais devolveriam os créditos e pagariam impostos diferidos e outras dívidas, o que implica que as perspectivas econômicas se tornarão lentas, com um período de pelo menos dois anos para recuperação.

Da CEPAL, propõem quatro propostas concretas para aliviar o impacto da crise econômica na região, que são a extensão dos termos das medidas de apoio à liquidez e acesso ao crédito, cofinanciamento de folhas de pagamento, transferências monetárias para trabalhadores independentes e apoio financeiro a empresas de todos os portes.

Especificamente, a agência está comprometida com o adiamento ou cancelamento de pagamentos de impostos, imposições, previsões e contribuições territoriais ou o adiantamento de reembolsos de impostos pelo menos até o final de 2020, bem como a suspensão do pagamento de serviços básicos sem multas até o final deste ano.

No lado do crédito, o relatório recomenda períodos de carência de pelo menos um ano, prazos de financiamento de cinco ou mais anos e o fortalecimento das operações de crédito por meio dos bancos de desenvolvimento.

No que diz respeito ao cofinanciamento de folhas de pagamento, a CEPAL aconselha ajudar em diferentes níveis, dependendo do tamanho da empresa. Assim, o co-financiamento da ajuda seria de 30% para as grandes, 50% para as médias, 60% para as pequenas e 80% para as micro. Isso suporia a mobilização de 2,7% da média do PIB.

Quanto às contribuições em dinheiro, a entidade está comprometida em conceder valores entre 300 e 500 dólares (267 e 45 euros) para os 15 milhões de trabalhadores independentes no continente, o que representa 0,8% do PIB.

A essas medidas se juntam outras propostas da instituição, como renda básica de emergência, bônus contra a fome e os apoios à empresas e emprego, como parte de um conjunto articulado de ajuda.

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