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En esta oportunidad presentamos este artículo de la novena edición de la Revista ALSUM donde el autor introduce al lector en el concepto de Logística Inversa, a través de la explicación de: cuando se produce su activación, los actores económicos involucrados, su impacto en la economía y los desafíos que representa para el seguro. El documento finaliza con un caso práctico aplicado a la industria automotriz, destacando las ventajas obtenidas.

 

 

Este artículo fue escrito por:

Jorge Ernesto Cruz Bolívar

Cuenta con más de 20 años de experiencia en temas de logística y seguros.

Correo electrónico: jcruz@cssc.com.co

 

 

Tuve la oportunidad de visitar una aseguradora que promovió internamente la creación de un equipo de trabajo autodenominado “Isis”[1], compuesto por verdaderos activistas y profesionales de diferentes disciplinas, a los cuales no les eran desconocidos los conceptos relacionados con crecimiento verde, desarrollo industrial sostenible, economía circular, posconsumo, responsabilidad extendida del productor (REP)[2] y logística inversa (en adelante, L. I.); su misión consistía en crear soluciones innovadoras que integraran el concepto de desarrollo-crecimiento económico, con el concepto de desarrollo ambiental-social y seguros.

La circulación de bienes dentro de los diferentes tipos de cadenas productivas genera impactos para el ambiente hasta el final de su vida útil, estos bienes tienen la capacidad de transformarse y a su vez aportar a la productividad, competitividad y, sostenibilidad, creando paralelamente nuevos riesgos.

“Al equipo Isis, tuve la oportunidad de preguntarle: ¿cómo podrían ustedes estructurar un modelo de aseguramiento sostenible si las pólizas que ofrece el mercado protegen casi todo tipo de productos? (químicos, petróleo, carbón, camiones, entre otras mercancías), con un alto impacto ambiental  y, con toda naturalidad contestaron ¡precisamente este es el momento para que realmente seamos consecuentes e innovadores¡, nosotros buscamos moralizar el nexo monetario con la moral, estamos convencidos de que es posible armonizar el concepto de cadenas globales de suministro con el concepto de suministro ético[3] construyendo paralelamente el concepto de seguro ético, donde la industria aseguradora pueda articular y conciliar la sostenibilidad con las cadenas globales de suministro, inteligencia artificial – IA y, la L. I.”[4]

El presente artículo plantea los retos de quienes hacemos parte del sector asegurador, el desarrollo de nuevos modelos y la ampliación de mercados para el seguro y la logística inversa.

I. ¿En qué consiste la L. I.?

La L. I. abarca el conjunto de actividades logísticas de recogida, desmontaje, y desmembramiento de productos ya usados o, sus componentes, así como los materiales de distinto tipo y naturaleza, con el objeto de maximizar el aprovechamiento de su valor, en sentido amplio de su uso sostenible y, en el último caso, su destrucción[5].

II. ¿Cuáles son las causas de la activación de la L. I. y sus actores económicos?

Las causas de activación de la L. I. pueden resumirse en la necesidad de los diferentes actores económicos del sector productivo, comercial y logístico (consumidores finales, administración pública, proveedores/reciclador, distribuidores, fabricantes o productores, operadores logísticos, sistemas integrados de gestión, etc.)[6] para gestionar inventarios estacionales de mercancías, productos obsoletos o devoluciones. Esto sucede cuando el producto fue recibido y lleva un tiempo rotando en la tienda, pero se debe regresar al fabricante por razones como cambio en el empaque o, por vencimiento o avería del artículo, rechazos —bienes que no son aceptados por el cliente debido a factores como error en el precio, vencimientos muy próximos y deterioros, entre otros—, retorno de exceso de inventarios y mercancías en estado defectuosos[7]. Mediante flujos o caminos de acuerdo con el tipo de producto que se puede reutilizar, revender, reparar, restaurar, refabricar, reciclar (envases, embalajes y, residuos peligrosos), verter o incinerar.

III. ¿Cuál es el impacto en la economía de la L. I.?

Dentro del proceso logístico y comercial de la cadena de consumo inversa — Transporte, almacenamiento, distribución— podemos identificar tres razones estructurales que justifican la L. I. ,como es el desarrollo de mejores y nuevos productos con costos de producción más bajos, por ejemplo, la recuperación de envases, empaques, embalajes y unidades de manejo reciclable, protección del medio ambiente, disminución de desperdicios, incremento de imagen corporativa de las empresas, fabricación de productos seguros y amigables ambientalmente, protección de la salud y la naturaleza, entre muchos otros beneficios en materia económica, responsabilidad social y relación costo-beneficio.

IV. ¿La L. I., un desafío para la industria del seguro?

Revisando diferentes esquemas de aseguramiento que buscan proteger el riesgo inherente a la operación logística (seguros sobre las mercancías, seguros sobre equipos de transporte, seguros de responsabilidad civil, seguros para propiedad e inventarios, seguros para contenedores, etc.) no se identifica que la industria aseguradora adelante esfuerzos que den una respuesta a los requerimientos y necesidades de aseguramiento para los riesgos tradicionales y emergentes que surgen en la L. I. presente en la cadena de valor de cualquier tipo de industria (v.gr., operadores logísticos, industria automotriz, química, aeronáutica y náutica, industria de perecederos, confecciones y plásticos, etc.).

El desafío para el sector asegurador consiste en identificar oportunidades de aseguramiento para diferentes riesgos, determinando su cuantificación, asegurabilidad, si son delimitables y calculables, permitiendo la estructuración de un esquema de aseguramiento de ciclo completo, desde la etapa más primaria del proceso industrial, hasta la etapa en que el consumidor final coloca nuevamente el producto en manos del fabricante original del bien u otro usuario industrial, donde el bien se transforma al ser remanufacturado, reciclado o reusado, y finaliza la vida útil del producto.

Algunas contribuciones del sector asegurador para el desarrollo de la L. I. y su aseguramiento:

  • Diseño de modelos de aseguramiento para el manejo inverso de la logística. Por ejemplo, el seguro para remanufacturado para diferentes tipos de cadenas logísticas (automotriz, llantas, computación, equipos industriales, etc.); seguros para reciclaje para productos que se deben desagregar, destruir, clasificas (plásticos, alimentos, confecciones, vidrio, etc.); póliza de R. C. profesional para los operadores logísticos de la I. (operadores logísticos, distribuidores de repuestos).
  • Inclusión en el contrato de seguro de cláusulas que proyecten coberturas, beneficios o auxilios a primera pérdida, cuando el medio ambiente pueda verse afectado con ocasión de la realización de un riesgo en la operación de la I.
  • Construcción de acuerdos con ONG, gremios industriales o instituciones de gobierno, que permitan el aseguramiento de bienes y servicios que tengan relación con la I. (bancos de alimentos, aprovechamiento de los residuos y material de estiba y unitización de puertos marítimos y secos, etc.).
  • Cobertura extendida de gastos para el final de la vida útil de un bien, ya que el fabricante no solo debe tener en cuenta su logística, sino también prever las acciones que habrá de adoptar al finalizar la vida útil del bien en relación con los costos del reciclaje, destrucción, reutilización, remanufactura, incluso, y los diferentes tipos de seguros deberán estar incluidos en el precio comercial.
  • Duración de la cobertura. La póliza de transporte de mercancías podría extenderse o rehabilitarse automáticamente para otorgar cobertura hasta el final de la vida útil de los bienes cuando estos se transformen en materia prima, se reutilicen o remanufacturen.
  • Tarifas y deducibles racionalizados a la realidad del riesgo. Teniendo en cuenta que la industria aseguradora ya protege el primer ciclo de la mercancía y, al extender la cobertura a la I. podrían aplicarse tarifas reducidas para la protección de un ciclo que hoy por hoy no se está asegurando. Así mismo, puede considerarse aplicar deducibles diferenciales para todos aquellos empresarios que se concienticen de la necesidad de contribuir con la protección del medio ambiente.
  • Diseño de cláusulas verdes. Incluir en la póliza de seguros para la logística cláusulas verdes o de responsabilidad social empresarial que estimulen a los asegurados para continuar trabajando en la defensa de un medio ambiente sano.

Gestión del conocimiento sostenible. Se adelanta mediante el desarrollo de programas de prevención, mitigación y corrección de efectos negativos que generan la mala disposición de materiales residuales, los cuales restan valor al entorno socioambiental de una organización.

V. La L. I. aplicada en la industria automotriz (planta de Choisy-le-Roi de Renault)

Cada año salen de circulación de las vías de la Unión Europea 12 millones de vehículos, esto se traduce en millones de toneladas de lo que realmente constituye un recurso valioso. La utilización de este recurso secundario, la inversión en tecnologías de reciclaje y el aumento en el uso de material reciclado ofrecen una perspectiva prometedora. Millones de vehículos de motor transitan por todo el planeta, garantizado la movilidad de las personas y la circulación de bienes y servicios. Los diferentes tipos de camiones distribuyen todo tipo de mercancías y vehículos especializados para la construcción de infraestructura son protagonistas en la realización de grandes proyectos, pero, la vida útil de estos vehículos no es eterna y tienen que ser eliminados, remanufacturados o reutilizados para diferentes procesos industriales[8].

El proceso de fabricación de los vehículos automotores presenta riesgos frente a la materia prima necesaria para su fabricación, como son el agotamiento de la materia prima (por ejemplo se estima que el plomo se agotará para el año 2030) por los problemas geopolíticos relacionados con países donde se extrae la materia prima. Otro riesgo se relaciona con los vehículos que no se usan y se convierten en residuos que pueden contaminar suelos en zonas de almacenamiento y desguace que, con frecuencia, se ubican cerca de carreteras o zonas industriales, esos suelos deben estar obligados a acondicionar el terreno para hacerlo impermeable y evitar su posible contaminación si se quieren obtener términos para un cobertura de seguros con permanencia extendida.

La producción de piezas de automóviles que se remanufacturen corresponde a bombas de inyección reductores, inyectores y turbocompresores. Hoy en día, 325 empleados trabajan en el sitio, fabricando sobre pedido, garantizando la ingeniería y producción de seis tipos de mecanismos. Las piezas refabricadas son exclusivamente para la reparación de los vehículos actualmente en uso.

Las piezas destinadas para el remanufactura, llamado ‘desechos’, pueden ser utilizados en el 90% de los coches que se fabrican y, mediante la logística inversa de la distribución de piezas de repuesto, los desechos son recogidos por la red comercial.

Ventajas

  • Reducción de costos de fabricación entre un 30-50%.
  • Las piezas reutilizadas tienen la misma garantía y están sometidas a las mismas pruebas de control de calidad como las piezas nuevas.
  • Las piezas remanufacturadas prolongan la vida útil de los vehículos, conservando su valor, ahorrando energía y reduciendo los residuos.
  • Crea y desarrolla una fuerza laboral capacitada.
  • Entre la fabricación de una pieza nueva y una pieza remanufacturada, el ahorro es: 80% menos de energía, 88% menos de agua, 92% menos de productos químicos y 70% menos de producción de desperdicio.
  • En cuanto a las materias primas, no se envían los residuos a vertedero: 43% de los (cadáveres materiales) son reutilizables4, 48% son reciclado en las fundiciones de la compañía para producir nuevas piezas; el 9% restante se valoriza en centros de tratamiento, lo que significa que todo el proceso es libre de residuos.[9]

[1]Isis: Diosa lunar, virgen-madre que da vida y salud, personificación de la naturaleza y del cosmos como principio femenino en la civilización de Egipto antiguo.

[2] Estrategia para una nueva Industrialización II/Colombia un País de Oportunidades. Bogotá, ANDI, 2017, p.p. 16 y 17.

[3] Ignatieff, Michael. Las virtudes cotidianas: El Orden Moral de un Mundo Dividido, Barcelona, Ed. Taurus, 2018, p. 35.

[4] Testimonio del autor

[5] Cabeza, Domingo. Logística inversa en la gestión de la cadena de suministro, México D.F., Alfa Omega-Marge Brooks, 2014, p. 24.

[6]Cabeza, Domingo. Logística inversa en la gestión de la cadena de suministro, México D.F., Alfa Omega-Marge Brooks, 2014, p. 46.

[7] Mora, Luis Aníbal, Gestión Logística Integral, Las mejores prácticas en la cadena de abastecimiento, Bogotá, Ecoe Ediciones, 2009, p. 294.

[8] Para más información ver: El reciclaje, un nuevo desafío para el seguro, Publicación de Munchener Ruckversisherungs-Gesellschft, 1996.

[9] Piezas remanufacturadas en 2012: coches: 14.681, reductores: 21.241, bombas de inyección: 32.691, inyectores/boquillas: 151.325, culatas: 3.540, 72% de la masa de una caja de cambios y el 37% de la masa de un motor (hierro, acero, aluminio).

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