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https://www.clarin.com/- «Mataron a un compañero que hacía entregas para Mercado Libre. ¿Qué opinan que se debe hacer en un intento de robo? Yo les doy la camioneta y les digo que se lleven todo. Qué expuestos estamos, y las empresas de Correo no lo reconocen. ¿No habrá ninguna marcha o algo así?», comenta uno de los miembros del grupo de Facebook «Trabajo para tu utilitario, camión o moto». La publicación es del miércoles 29 de julio, a 48 horas del crimen de Fernando Marino (28).

Varios de los 33 comentarios reflejan la situación en la que trabajan los repartidores que manejan camionetas tipo utilitarias. «Algunos trasladamos hasta 2 millones de pesos en carga. Se está poniendo de moda robar a los fleteros. Tengamos mucho cuidado», afirma uno. Otro agrega que el mes con más robos es diciembre. «Yo trabajaba en el Correo Argentino y renuncié; no vale la pena que te maten», asegura Lautaro. Otros dos cuentan que se cansaron de ser asaltados, y que decidieron trabajar armados. Al que aclara que las empresas tienen las cargas aseguradas, y sugiere no resistirse, le responden «pero si te matan igual». También, hay un mini debate sobre si vale la pena o no convocar a una marcha para exigir seguridad para el rubro.

Fernando Marino fue asesinado el lunes 27, cerca del mediodía, en Adrogué. Arriba de su Renault Kangoo, buscaba un domicilio en las inmediaciones de Italia y Bouchard. Debía entregar un pedido. De repente, una moto con dos delincuentes se le puso a la par. Lo apuntaron. Se cree que en ese momento, Marino realizó una maniobra brusca ante el susto por la amenaza y uno de los delincuentes le disparó.

La secuencia fue registrada por una cámara de seguridad. Cuarenta y ocho horas después, la Policía Bonaerense​ detuvo a una pareja, en la zona de Burzaco. Están acusados de Homicidio y Tentativa de robo.

Dos motochorros mataron a un repartidor en Adrogué. La víctima fue identificada como Fernando Marino.

Dos motochorros mataron a un repartidor en Adrogué. La víctima fue identificada como Fernando Marino.

«Hace años que los robos a camiones de gran porte comenzaron a bajar. Es que las empresas cambiaron el tipo de reparto, por la inseguridad. En lugar de enviar toda la mercadería en un camión, prefieren hacerlo en diez camionetas. Entonces, si asaltan a un utilitario, se llevan un porcentaje chico de la carga, y no el total, como pasaba cuando robaban el camión». El que habla es Víctor Varone, de Pirateríadecamiones.com.ar, firma que desde 2007 coordina la Mesa Interempresarial de Piratería de Camiones.

A esa tendencia se le debe sumar el crecimiento de la venta on line, y su entrega «puerta a puerta». Cada vez hay más camionetas en la calle brindando el servicio.

El último Mapa del delito que difundieron es de julio de 2018 al 31 de agosto de 2019. Contabilizaron 1538 robos. En el 80 por ciento de los casos, la carga iba en camionetas. El resto, en camiones. «Los piratas del asfalto son empresarios del delito. Buscan la rentabilidad. Y hoy, para ellos, está en las camionetas. Necesitan mucha menos estructura», agrega Varone.

Los camiones de gran porte suelen ir con un auto de custodia. Y cuentan con sistema satelital. Para desconectarlo, los ladrones deben llevar un inhibidor. Para reducir a los hombres de seguridad y al chofer, más el que se encarga de inhibir la señal, las bandas deben ser numerosas: Varone dice que suelen ser de 10 ladrones.

En cambio, para asaltar a un repartidor, pareciera que con dos hombres y un vehículo alcanza. Según estadísticas del último Mapa del delito, en el 57 por ciento de los robos, se utilizó uno solo. Y el 64 por ciento de los casos, fueron cometidos por dos hombres. Se cree que una pareja de asaltantes puede robar a hasta tres o cuatro camionetas por día. O mejor dicho la carga. Rara vez se quedan con el utilitario. Por lo general, lo abandonan a las horas.

Fernando Marino, de 28 años, había empezado a trabajar con el vehículo de su padre. Fue asesinado por motochorros en Adrogué.

Fernando Marino, de 28 años, había empezado a trabajar con el vehículo de su padre. Fue asesinado por motochorros en Adrogué.

«Son delincuentes que saben dónde buscar. Por ejemplo, dicen ‘en Haedo, entre las 9 y las 17, seguro cruzamos tres o cuatro camionetas haciendo repartos’. Es al azar. Roban la carga sin saber si adentro hay celulares o chupetes», concluye Varone. Según pudo saber Clarín, hay ladrones que se guían por la altura de la carrocería: a cuanto más bajo, más peso. Y eso es sinónimo de que la carga será buena.

Una de las zonas calientes es el sur de la Ciudad, donde hay varias logísticas. Aunque allí se registran robos modalidad «piraña»: ladrones que abren las puertas de las camionetas y se llevan lo que pueden. Otros prefieren hacerlo por «descuido»: roban cajas sin que los choferes lo noten. Y los más sofisticados: usan el inhibidor de alarmas e ingresan a las camionetas cuando los repartidores bajan a entregar un pedido.

Consulte la noticia original en: https://www.clarin.com/

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https://www.clarin.com/- ‘They killed a comrade who was making deliveries for Mercado Libre. What do they think should be done in an attempted robbery? I give them the van and tell them to take everything. How exposed we are, and the mail companies do not recognize it. Won’t there be any march or something? ‘ commented one of the members of the Facebook group ‘Work for your utility, truck or motorcycle’. The publication is from Wednesday, July 29, 48 hours after the murder of Fernando Marino (28).

Several of the 33 comments reflect the situation in which the delivery workers who drive utility vans work. ‘Some of us move up to 2 million pesos in cargo. It’s becoming fashionable to steal from shippers. Let’s be very careful’, says one. Another adds that the month with the most robberies is December. ‘I worked at the Argentine Post Office and I resigned; it’s not worth killing you’, says Lautaro. Two others say they got tired of being assaulted and decided to work with guns. To the one who clarifies that the companies have the insured burdens, and suggests not to resist, they answer ‘but if they kill you the same’. Also, there is a mini debate about whether to call a march to demand security for the business.

Fernando Marino was killed on Monday the 27th, around noon, in Adrogué. Above his Renault Kangoo, he was looking for an address near Italy and Bouchard. He had to deliver an order. Suddenly, a motorcycle with two criminals caught up with him. They pointed it at him. It is believed that at the time, Marino staged a sudden maneuver in the face of the threat and was shot by one of the criminals.

The sequence was recorded by a security camera. Forty-eight hours later, the Buenos Aires police arrested a couple in the area of Burzaco. They are accused of Homicide and Attempted Robbery.

Dos motochorros mataron a un repartidor en Adrogué. La víctima fue identificada como Fernando Marino.

‘It’s been years since the theft of large trucks began to go down. It’s because the companies changed the type of distribution, because of insecurity. Instead of shipping all the merchandise in a truck, they prefer to do it in ten vans. So, if they assault a utility car, they take a small percentage of the load, and not the total, as happened when they stole the truck’. The speaker is Víctor Varone, from Pirateríadecamiones.com.ar, a firm that has coordinated the Inter-Company Bureau of Truck Piracy since 2007.

To this trend must be added the growth of online sales, and their delivery ‘door to door’. There are more and more trucks on the street providing the service.

The last crime map they released was from July 2018 to August 31, 2019. They counted 1,538 robberies. In 80 percent of the cases, the cargo went in vans. The rest, in trucks. The asphalt pirates are entrepreneurs of crime. They seek profitability. And today, for them, it is in the vans. They need much less structure’, adds Varone.

Large trucks usually go with a custody car. And they have a satellite system. To disconnect it, thieves must carry an inhibitor. To reduce the security men and the driver, plus the one in charge of inhibiting the signal, the bands must be numerous: Varone says that they are usually 10 thieves.

Instead, to assault a delivery man, it looks like two men and a vehicle will do. According to the latest crime map, in 57 percent of thefts, only one was used. And 64 percent of the cases were committed by two men. It is believed that a pair of assailants can rob up to three or four vans per day. Or rather the cargo. They rarely keep the utility car. They usually leave it on time.

Fernando Marino, de 28 años, había empezado a trabajar con el vehículo de su padre. Fue asesinado por motochorros en Adrogué.

Fernando Marino, 28, had started working with his father’s vehicle. He was killed by motorcycle jets in Adrogué

They are criminals who know where to look. For example, they say in Haedo, between 9 and 17, surely, we crossed three or four trucks making deliveries’. It is random. They steal the load without knowing if there are cell phones or pacifiers inside’, concludes Varone. As Clarin might have known, there are thieves who are guided by the height of the body: the lower, the more weight. And that’s synonymous that the load will be good.

One of the hot spots is the south of the city, where there are several logistics. Although there are recorded robberies modality ‘piranha’: thieves who open the doors of the vans and take what they can. Others prefer to do it for ‘carelessness’: they steal boxes without the drivers noticing. And the more sophisticated ones: they use the alarm inhibitor and get into the vans when the delivery guys come down to deliver an order.

See original article at: https://www.clarin.com/

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https://www.clarin.com/- «Mataram um colega que fazia entregas para o Mercado Libre. O que você acha que deve ser feito em uma tentativa de roubo? Dou o caminhão para eles e digo para levar tudo. Como estamos expostos e as empresas de correio não reconhecem. Não haverá protesto ou algo parecido? ”Diz um dos membros do grupo do Facebook“ Eu trabalho para seu veículo utilitário, caminhão ou motocicleta ”. A publicação é de quarta-feira, 29 de julho, 48 horas após o crime de  Fernando Marino (28).

Vários dos 33 comentários refletem a situação em que trabalham os entregadores que dirigem vans. “Alguns de nós carregam até 2 milhões de pesos. Roubar entregadores de carga está se tornando moda. Vamos ter muito cuidado ”, diz um. Outro acrescenta que o mês com mais roubos é dezembro. «Trabalhei nos Correios argentinos e parei; não vale a pena se matar” diz Lautaro. Outros dois dizem que se cansaram de ser assaltados e decidiram trabalhar armados. A quem esclarece que as empresas têm cargas seguradas, e sugere que não resistam, respondem “mas se matam mesmo assim”. Além disso, há um mini debate sobre se vale ou não a pena fazer uma marcha para exigir segurança para o setor.

Fernando Marino foi assassinado na segunda-feira, 27, por volta do meio-dia, em Adrogué. Com seu Renault Kangoo, ele procurava um endereço nos arredores da Itália e de Bouchard. Ele tinha que entregar um pedido. De repente, uma motocicleta com dois criminosos o alcançou. Acredita-se que naquele momento Marinho tenha feito uma manobra abrupta devido ao choque da ameaça e um dos criminosos atirou nele.

A sequência foi gravada por uma câmera de segurança. Quarenta e oito horas depois, a  Polícia de Buenos Aires  deteve um casal na área de Burzaco. Eles são acusados de homicídio e tentativa de roubo.

Dos motochorros mataron a un repartidor en Adrogué. La víctima fue identificada como Fernando Marino.

Dois jatos de motocicleta mataram um entregador em Adrogué. A vítima foi identificada como Fernando Marino.

“Anos atrás, os roubos de caminhões grandes começaram a diminuir. É que as empresas mudaram o tipo de distribuição, devido à insegurança. Em vez de despachar todas as mercadorias em um caminhão, eles preferem fazê-lo em dez caminhões. Então, se eles roubam um utilitário, eles levam uma pequena porcentagem da carga, e não o total, como aconteceu quando o caminhão era roubado. Quem fala é Víctor Varone, da Pirateríadecamiones.com.ar, empresa que desde 2007 coordena a Mesa Interempresarial de Pirataria de Caminhões.

A esta tendência deve ser adicionado o crescimento das vendas online e sua entrega porta a porta. Cada vez mais vans estão nas ruas prestando o serviço.

O último mapa do crime lançado foi de julho de 2018 a 31 de agosto de 2019. Eles contaram 1.538 roubos. Em 80% dos casos, a carga estava em vans. O resto em caminhões. «Os piratas do asfalto são empresários do crime. Eles buscam lucratividade. E hoje, para eles, está nos caminhões pequenos. Eles precisam de muito menos estrutura”, acrescenta Varone.

Caminhões grandes geralmente vão com um carro de segurança. E eles têm um sistema de satélite. Para desconectá-lo, os ladrões devem usar um inibidor. Para reduzir os seguranças e o motorista, mais aquele que se encarrega de inibir o sinal, as quadrilhas devem ser numerosas: Varone diz que costumam ser dez ladrões.

Por outro lado, para roubar um entregador, basta chegas com dois homens e um veículo. De acordo com as estatísticas do último Mapa do Crime, em 57% dos roubos, apenas uma pessoa era o assaltante. E 64 por cento dos casos foram cometidos por dois homens.  Acredita-se que um par de ladrões pode roubar até três ou quatro vans por dia, ou melhor, a carga. Eles raramente ficam com o utilitário. Normalmente eles saem dentro de horas.

Fernando Marino, de 28 años, había empezado a trabajar con el vehículo de su padre. Fue asesinado por motochorros en Adrogué.

Fernando Marino, 28, começou a trabalhar com o veículo do pai. Ele foi morto por jatos de motocicleta em Adrogué.

«São criminosos que sabem onde procurar. Por exemplo, eles dizem “em Haedo, entre 9h e 17h, certamente cruzaremos três ou quatro caminhões fazendo entregas”. É aleatório. Eles roubam a carga sem saber se tem celular ou uma chupeta dentro ”, finaliza Varone. Conforme o jornal Clarion, existem ladrões que são guiados pela altura da carroceria: quanto mais baixo, mais peso.  E isso é sinônimo de boa carga.

Um dos pontos quentes é a zona sul da cidade, onde existem várias logísticas. Embora haja furtos do tipo «piranha»: ladrões que abrem as portas dos camiões e levam o que podem. Outros preferem fazê-lo “por descuido”, roubam caixas sem que os motoristas percebam. E o mais sofisticado: usam o inibidor de alarme e entram nas vans quando os entregadores descem para entregar um pedido.

Veja a notícia original em:  https://www.clarin.com/

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