ALSUM – Sin duda alguna, con la llegada de una pandemia han sido muchos los retos que enfrenta la humanidad, sin embargo, el camino es largo para todos los actores de la cadena de distribución, para Erika las asociaciones de seguros deben tomar un rol prioritario, así como el apoyo que los gobiernos tendrán que brindar. No se trata de una tarea sencilla, se convierte en una obligación social que debemos cumplir.
¿La sociedad y las empresas están preparadas para esta tarea? Federico hace una reflexión sobre la empatía con el cliente, pues no se trata únicamente de suscribir el riesgo, sino que existe la responsabilidad de garantizar la integridad de la carga, de involucrarse completamente con el cliente, demostrar interés y tratar de asesorarlo con el conocimiento que los diferentes actores tienen dentro de la logística del proceso. Además, prevé una alta implicación de los gobiernos debido a su injerencia en la normativa y el control para lograr la correcta distribución de la vacuna.
José Luis se arriesga a denominar este panorama como “El movimiento de mercadería más sensible e importante del último siglo”. Su preocupación radica en dos factores: el tiempo y la distribución ya que en algún punto toda la población se tiene que vacunar y lo debe hacer a un tiempo récord. Esto implica un grado de estrés elevado. Y, además, se habla de una mega distribución donde todavía no hay contratos firmados, hay inversión estatal para prefinanciación, pero no hay contratos oficiales pues la vacuna no existe.
Ahora bien, ¿quién será capaz de articular tantos actores a la vez? Luis Guillermo, desde su experiencia sabe que son las agremiaciones las que están en la facultad de lograrlo, tendrán que hacer ese enlace y articular la oferta y la demanda. Su misión es reunir el cúmulo de experiencias y saberes de los diferentes involucrados en la cadena de distribución. Es la oportunidad para brillar por su aporte a la sociedad y a la economía.
Finalmente, son muchos los factores a tener en cuenta en el futuro cercano, además de los ya mencionados también se debe administrar el riesgo de las condiciones especiales de temperatura y transporte de la vacuna, que aun se desconocen, así como el lugar de almacenamiento masivo en cada país, una estructura física que a la fecha no existe. Se trata de una carrera contra el tiempo, pues no solo es tener la vacuna sino poder distribuirla.[:]