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En este blog hacemos una reseña del dossier publicado por IUMI el 8 de diciembre de 2020 sobre los retos logísticos que enfrentará la distribución de las vacunas contra el COVID-19.
Para consultar el documento original diríjase a https://iumi.com/uploads/201208_COVID_Vaccine_Distribution_1.pdf
Actualmente hay más de 100 desarrollos de vacunas contra Covid -19 en todo el mundo, varias de ellas en la etapa 3 de pruebas y se estima que la industria logística deberá distribuir 10 billones de dosis alrededor del mundo en los próximos dos años, en una compleja operación que garantice la efectividad y la eficiencia, por lo que este se convierte en uno de los mayores retos para el sector en su historia.
Hay en especial tres retos que inquietan al sector marine:
Mantener las temperaturas necesarias durante la cadena de abastecimiento es el mayor reto que deberá asumirse para el transporte y almacenamiento de las vacunas, que dependiendo de su composición tendrán diferentes requerimientos; algunas necesitarán temperaturas tan bajas como -80°C, mientras que otras solo requerirán entre 2°C y 8°C, un rango común en productos farmacéuticos.
En caso de que sea necesario alcanzar temperaturas extremadamente bajas será indispensable un proceso de envío preciso y muy bien organizado, que deberá incluir variables como contenedores con refrigeración especial, algunos con hielo seco; un riguroso monitoreo y control de la temperatura con mecanismos en las superficies, empaques especiales y seguimiento en tiempo real, sumado a procedimientos operativos estándar (SOPs por sus siglas en inglés), que garanticen que todos los intermediarios a lo largo de la cadena de suministro están bien informados sobre la naturaleza del producto y que cumplirán de forma estricta todos los estándares, ya que de lo contrario, todo el envío podría ser rechazado.
Las medidas de prevención de pérdidas, las técnicas de gestión del riesgo y las acciones de contingencia juegan un papel importante para mitigar los problemas de temperatura y retrasos que puedan presentarse y poner en riesgo la operación.
El riesgo de robo o secuestro de las vacunas en algunos países es otra de las preocupaciones, por lo que se deben implementar programas de seguridad de la cadena de suministro que incluyan dispositivos anti manipulación, escoltas armados (cuando sea permitido), seguridad adicional para los camiones, seguimiento por GPS, conducción en caravanas seguras y apoyo militar, dependiendo del nivel de riesgo en cada territorio.
Algunos países ya se están preparando, pero el enorme volumen de envíos de vacunas requerirá planificación para garantizar que el proceso sea escalable. La gestión proactiva de riesgos desde la «cuna hasta la tumba» será esencial.
Finalmente, nos encontramos con la pérdida de capacidad de la cadena de abastecimiento, ya que si bien IUMI reconoce que el transporte aéreo de las vacunas será probablemente el más rápido, con la disminución de los vuelos de pasajeros a causa del COVID-19 una parte importante de la capacidad aérea ha sido sacada del mercado y tener compañías que hasta ahora no se han especializado en cadenas de frío, envío y almacenamiento de productos farmacéuticos será introducir un nuevo riesgo al proceso logístico.
Si bien se espera que muchos países puedan abastecerse de las vacunas de forma doméstica, evitando grandes procesos logísticos, los gerenciadores de riesgos deberán tener una comprensión completa de las capacidades de la industria del transporte en las diferentes geografías, ya que manejar la operación será más difícil en unos países que en otros.
En conclusión, prepararse y responder a estos riesgos facilitará la entrega sin problemas de las vacunas. Las aseguradoras marítimas son facilitadoras en este proceso y su experiencia en el manejo y mitigación de riesgos debe ser ofrecido a los clientes de forma proactiva para ayudar al mundo a volver a una «nueva normalidad».
Fuente: COVID-19 vaccine logistics: Potential risks and pain points. IUMI, 8 December 2020.
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